domingo, 23 de octubre de 2016

Con O Sin Tetas No Hay Paraíso



Me sentía tramado por los hechos que ocurrieron en una turística ciudad como Pereira, que sus habitantes la aclaman como ‘La Perla Del Otún’, además de ver a las mujeres de allá como las ‘ninfas’ modernas, o mas bien la versión paisa de la Venus de Botticelli, que a decir verdad, el contexto de los paisas como la cuna de los ‘traquetos’, no siempre fijos en lo que el Padrino paisa, Pablo Escobar, diciendo que todo se soluciona con dinero, pero en si el dinero no es lo único complaciendo al crimen organizado. En este punto, Gustavo Bolivar, el cerebro de una serie celebre como la de ‘Unidad Investigativa’, que de un capitulo ahí se salga a la popularidad con ‘Pandillas, Guerra Y Paz’, le haga una apuesta con una historia como la de Catalina Santana, la que se ilusionaba con un par de tetas que tendrían el toque de Midas para los ‘traquetos’, que para esa niña un cuento de hadas se pase a ser un cuento de terror en vida.


No hay duda que una historia algo diferente a la de ‘The Godfather’, se refiera a la mujer, como un verdadero juguete sexual para los mafiosos, ilusionados con ver a una venus como Pamela Anderson, o incluso una muy voluptuosa Natalia Paris complaciendo a esos clientes que para una mujer de aspecto decente, sienta interés en el dinero de algún narcotraficante que no se bañe todos los días, o que tenga una aliento espantoso, y vivan lo que ellas llamen una pesadilla fatal. De hecho, las mujeres y chicas plásticas, algunas de ellas sientan el verdadero amor por esos hombres que siempre se preocupen por ellos, y viceversa. La protagonista de una historia sin igual como ‘Sin Tetas No Hay Paraíso’, ese deseo de operarse los senos con siliconas es la ilusión para una chica de clase baja, pero que es la más despampanante de Pereira, sea la razón para que algún ‘traqueto’ se fije en ella, y así se vea beneficiada económicamente.

La Pequeña Catalina, Mi Hija Es ‘Prepago’, Mi Hijo Un Matón

Gustavo Bolivar se enfoca en una cruda realidad en nuestro país, no solo por las huellas del conflicto armado, la muerte de personas tan importantes como Gaitán y Galán, pero otro caso como las cicatrices que deja el narcotráfico en los barrios vulnerables, y en especial en Pereira, otra ciudad que tambien alberga mafias de cualquier calibre, y tambien financiando el paramilitarismo. Nos centramos en una chica de 14 años, Catalina, que vivía con su hermano Byron, que se ganaba la vida como sicario para llevar el sustento para su casa, a pesar que su madre, Hilda, que tenia un empleo decente pero su situación precaria no ameritaba lo suficiente para sacar a sus hijos adelante. Catalina además tenía un novio, Albeiro.


El mundo para Catalina tornaba en una ilusión cuando ellas y otras de sus amigas, se convertían en las atracciones para los ‘duros’, gracias a que una de ellas, como la inescrupulosa Yésica Beltrán, que muchos la conocían en el barrio como ‘La Diabla’, era la que se encargaba de arreglar las citas a los mafiosos con las chicas de su catalogo. La belleza de Catalina era lo más envidiable de todas las mujeres, no solo por su inteligencia, siendo una chica aplicada del colegio. Sin embargo, esa ilusión se rompe, al igual que su autoestima, por sentirse desmoralizada y con baja autoestima, al ser rechazada por una razón, sus senos, y por cierta razón decidió trabajar como prostituta para conseguir los cinco millones para proceder con la operación de implantarse silicona.

La ‘Diabla’, Celosa Pero Triunfante

Yésica, o más bien ‘La Diabla’, era una mujer que desde hace mucho tiempo le sentía envidia y rabia hacia Catalina, además de ganarle hasta en los exámenes de matemáticas y deportes, su belleza tambien era lo que celaba todos los días, en el fondo ella la odiaba. Por tener un carácter malicioso y sin escrupulos, ya la apodaban como la Diabla. Se metio al bajo mundo como una simple proxeneta, lavándole el cerebro a las niñas del barrio, arreglándole cita a cualquier mafioso que se interesaba en tener su noche de pasión, o conseguirle una primera dama del crimen organizado.


La vida de Catalina se llenó de prgoreso, luego de fijarse en un narco, Cardona, brindándole ropa lujosa, celular de alta gama, hasta dándole transporte de categoría. Yésica como tal, sentía mas rabia hacia esa muchacha que consideró su rival desde la infancia. Sin embargo, siendo aun estratega, se llevo a Catalina a Bogotá para llevarla a una clínica estética para iniciar la operación, no hasta que consiga llegar a la casa de algún que otro pichon que la Diabla conocio en el pasado, y luego lo deje con los bolsillos vacios. Hasta que ella celebraba por dentro viendo a su ‘amiga’ pagando las consecuencias por la primera operación, un cirujano plástico, Mauricio Contento, que le implantó un par de protesis de silicona usadas, y le causa una infección, y le llevo un tiempo para recuperarse. Mas adelante, la encantadora Catalina recibe una llamada de La Diabla, preparándole una cita con otro poderoso capo como Marcial Barrera, un hombre que en realidad se enamoró de Catalina y con el paso de los días, ella le acepta la propuesta de matrimonio. Desafortunadamente todo se cae de bruces, es un castillo de naipes que La Diabla, aun frustrada con el progreso de su amiga, se encarga de destruirla silenciosamente, debido que le lavaba el cerebro a Catalina para difamar a Marcial, y acto seguido él olvide a Catalina del todo, y así la Diabla se convierte en esa primera dama, un viaje a Europa les hace cambiar el rumbo.

Cronica De Una Tragedia Anunciada

Por culpa de ostentar una vanidad que no le convenía, un simple par de tetas, Catalina perdió todo lo que se habia obtenido, y no le quedaba mas remedio que regresar a Pereira con la cola entre las patas, el primer implante se lo aplico por un cirujano de poca reputación que en realidad, no acepto el dinero del todo pero si el resto se lo cobraba a Catalina con acostarse con él, Mauricio Contento. Una infección le cambia el rumbo a Catalina, e ignorando las recomendaciones de los médicos, sufre otra consecuencia al implantarse unas tallas mas grandes, que sin recuperarse casi le cobran su salud.



Por pensar en ese cielo prometido, le carcomía la conciencia, y psicológicamente desbaratada, ya sentía la tentación del suicidio. Su familia empieza a derrumbarse, empezando por la muerte de su hermano Byron, Doña Hilda, deprimida al respecto, y que no tenía más noticia de su hija, Catalina, una ilusa deambulando en la calle. Y en cuanto a Albeiro, que sufría los insultos y desprecios de su ya ex novia, no le quedó mas remedio aceptar el amor de su suegra, Doña Hilda, que ya tenía cuatro meses, y que durante su ausencia, él era su amante perdido. La pobre Catalina los ve juntos y los felicita por ver en ellos una promesa de amor eterno, se despide de manera sencilla. Se sentía frustrada al ver que los médicos que le extrajeron las siliconas pesadas le dicen que su recuperación tarda años, y luego podía operarse de nuevo. 
 
La traición por parte de la que consideró su amiga, Catalina, planeó un crimen perfecto para llevar a cabo su venganza, contando con un ex escolta de Marcial y enamorado secreto de Catalina, el tal Pelambre. Una cita con Yésica en un café era el escenario para que Pelambre envíe dos sicarios que acaben con la vida a una chica que abrazaba la biblia, por pensar en sus locos errores y pecados que cometió en el pasado, algo que Pelambre inesperadamente descubre que el objetivo de sus matones era la misma Catalina, quien esperaba la llegada de quienes serían sus ‘salvadores’. En la biblia, la victima subrayó una referencia al paraíso según un pasaje de Lucas, que anuncia la ultima parada de un viaje de una niña ignorante ante la realidad de los adultos, viviendo con una madre de un trabajo humilde, un hermano que se ganaba la vida matando gente, por satisfacer la necesidad de su familia, y un novio débil que eran parte de ese entorno complejo. Y en ese pasaje, Catalina escribe su última frase


‘¡Pura Mierda… Sin Tetas No Hay Paraíso!’.

Gustavo Bolivar quiere plasmar la realidad de las mujeres de hoy en días, en este caso, las adolescentes, que anhelan ser el estereotipo de un modelo perfecto que se gana el dinero y las cosas que quiere todos los días, una señal abrumadora de inconformismo, una ambicion ciega por seducir a los que considera la mina de oro. Desafortunadamente, esto es la falta de ética y moral que sucede en estos días, y sin saber cómo son las consecuencias, los sueños se van desvaneciendo, y la falta de compromiso familiar hace que esa orientación se pierda y en el peor de los casos las malas amistades aceleran la magnitud de ese daño que se vuelve irreparable, y es muy realista ver lo que la gente ha ignorado desde lo que se aprendio en la infancia, y todo debido a la influencia de las ‘narconovelas’ y la tecnología. 

Hasta el próximo miércoles.

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