Este fin de semana fue el estreno simultaneo de Cruella, tanto en Disney+ como en cine, una precuela de 101 dálmatas que hace que Emma Stone nos cuente sobre la rebelde juventud del personaje de nuestra carismática Glenn Close, la heroína de ‘Damages’ y ‘The Shield’, y lo que nos cuenta Emma Stone es una versión de esta obsesiva villana al estilo de Harley Quinn, con espíritu rebelde e incontrolable, y aquí se ve el regreso de los remakes live action de los clásicos animados de Disney.
La actuación de Emma Stone da ese toque mágico a ese espíritu indómito dentro de su obsesión con la moda, y en este universo de Disney se crea una historia que cita referencia de sus obras previas. En esta reflexión, veremos algunos detalles clave para desmenuzar lo que vimos por estas dos horas y quince minutos de narrativa.
Villanos Que Despiertan Su Lado Sensible
Nos podemos hacer comparaciones con otras historias en las que los más temidos enemigos pierden a sus seres queridos, y eso les carcome el corazón; y en esta historia de Disney, vemos a una mujer que ha tenido esa terrible intención de matar a unos inocentes cachorritos, la sociedad definir a alguien psicópata y mucho peor con la idea de maltratar y privarle la vida a un indefenso animal, y este personaje se hace un cierto parecido a Maléfica, otra villana transformada, que aun carece los ideales de su maldad, como lo vimos en esa película de hace casi siete años.
En lo que vive esta mujer despechada, es la realidad de una empresa de alto calibre cuando le cierra la puerta a personas que son inteligentes, y se les niega la oportunidad por temor a ser mejor exitosas, y desde ese punto, se ven expuestas a un riesgo social inminente, vistos como alguien reducido. De hecho, existen personas que obtienen en ese éxito y prestigio personal y profesional, y al lograr ese éxito, las empresas son superadas y terminan (en algunas instancias) desprestigiadas. Entonces, la idea del repudio hacia los dálmatas fue superficialmente mencionado, pero este personaje lo desecha, como si eso se hubiera superado. La narrativa para algunos suena un absurdo, a la hora de ver a un trio de dálmatas, pues estos son puestos en segundo plano.
Por ende, los dálmatas son esa raza de perros que han causado desgracias a algunos desdichados, entre estos la misma Cruella, la misma que ha despreciado a esa raza de perros, que ha mató a sus padres, y de ahí su obsesión por sacrificarlos por hacer un preciado abrigo de pieles de este. Sin embargo, puede decirse que Cruella es la misma culpable de tal causa y no la de los perros; en otras palabras, Cruella es la autora intelectual y los perros, los autores materiales de ese asesinato, hacerse sentir culpable de lo que sucedió.
Un Simple Nombre Que Guardó El Secreto
El nombre de pila de esta mujer con rasgos lunáticos es ‘Estela’, de verse como esa niña imposible de controlar, y su rebeldía se evidencia en su distinta manera de vestirse, e impedir la superioridad ente ella, por esa personalidad invadida por su crueldad, de ahí, su madre la obligaba a mantener esa personalidad en el anonimato, de ahí entendemos su nombre como tal, ‘Cruella’.
De no tener a donde ir en Londres, ahí es donde conoce a dos ladrones de poca monta, Gaspar y Horacio. No los ve como a sus amigos y cómplices, sino como a su familia, de ahí subsisten como simples carteristas; pero ya pasan diez años, y nuestra querida Estela busca cumplir su sueño como ser una prestigiosa diseñadora de modas. Entonces, su idea es entrar a la casa de modas de ‘La Baronesa’, una mujer sumamente exitosa, y lo más evidente es su modo de ver al mundo que la rodea muy reducido y despreciable, como para decir que tiene a todos comiendo de su mano. En la mente se Estela, es ver a esa Baronesa para alimentar sus ideales de ser alguien tan despiadado y ver que la frase de ‘el bien triunfa sobre el mal’, y lo que pierde, o no lo consigue, ahí es donde jura su ardiente deseo de venganza, tiene resultados opuestos, psicología a la inversa.
Una Historia Que Se Alimenta De Referencias
Los primeros sesenta minutos son ese recuento de la infancia de Cruella y su primera etapa de la adultez, y existe una chica rebelde que cree alcanzar la cima está a la vuelta de la esquina, y esta cinta tiene un tono gótico al estilo ‘El Diablo Viste A La Moda’, donde la jefa demuestra sus facetas de narcisismo, y el cabello de Cruella muestra las dos caras de la moneda. En efecto, Cruella no solo cita referencias a ‘101 Dálmatas’, sino que es una combinación entre ‘Misión Imposible’ y ‘La Gran Estafa’.
El personaje de Emma Stone está bien moldeado, los dos colores de su cabello no simplemente son la evidencia de su doble personalidad, o incluso su bipolaridad, donde puede verse la idea de matar a los perros y a su némesis sea tanto una broma, como una cierta intención fija, o incluso haya un conflicto mental donde ella recuerde a Gaspar y a Horacio como esos que vio como sus hermanos.
El Esteticismo Punk Con Sabor A DC
Cruella puede tener matices tanto de pelicula como de telenovela, se puede observar que Cruella demuestra sus intenciones de desprestigiar a su rival por diversión y lograr alardear su superioridad. La personalidad tipo ‘punk’ y ‘gótico’ dentro del ámbito londinense se adentra a los ideales narrativos de algunos villanos ilustres de Batman, entre estos, como el Guasón, el Pingüino, Acertijo y Harley Quinn.
La pelicula tiene una cierta ambientación de la década de los setenta, los baby boomers, en ese momento que Queen hace un gran impulso con el boom del rock alternativo con su canción ‘Bohemian Rhapsody’, pero aquí la idea del punk para despertar personalidades rebeldes es el ingrediente principal para darle ese salvajismo y sarcasmo a esa joven Cruella, una impulsadora del capitalismo y la monopolización de la moda, una publicidad que sólo comunica una personalidad salvaje, y un ejemplo musical es preciso el tema ‘Now I Wanna Be Your Dog’, tanto de hacer de sus fans y futuros clientes los perros que hará comer de su mano.
En Conclusión
La historia de Cruella es entretenida en muchos aspectos, así como adaptar a una personalidad perteneciente a la aristocracia a un contexto prácticamente actual, en una juventud demasiado rebelde, como mermarle a ese sentimiento maldadoso en esa inmersión a los ideales del ‘punk’. Se menciona que lo que hace su director, Craig Gillespie, es crear una película estilo ‘heist’, pensar en el atraco del momento, y dejándole esa responsabilidad a Emma Stone, una actriz que mantiene ese carisma en sus roles, y aquí que haga una especie de similitud a la Harley Quinn de Margot Robbie.
Estamos deseosos por volver a las salas de cine, y que esta pandemia ya sea un caso archivado y se dé el chance de volver a esos momentos inolvidables en el comercio, y ver que aun se mantenga esa fiebre de los disfraces de Cruella DeVil, ver chicas que querrán disfrazarse de esa mujer de doble personalidad.